Itinerario circular por los alrededores de Vilobí d´Onyar en la Selva

Ruta circular de casi 10 km de longitud que, desde la iglesia de Sant Esteve en el centro de Vilobí d'Onyar, atraviesa la ribera de Onyar, se adentra en los campos de cultivos de Can Salamanya, Can Bosquets, Can Valls, Can Xifra, Can Toni y Can Coll, y llega al Rec de Banyacans. Seguidamente entra en el núcleo de Sant Dalmai y alcanza la cresta del Bosque de Tries, justo en el límite del volcán de la Crosa. Sigue bosque adentro y baja nuevamente a la llanura para encontrarse con la ermita de la Virgen de las Fonts. Desde el área de picnic de las Fuentes de Salitja, rodea los Amaradors de Salitja, el molino de las Fonts y, resiguiendo la acequia de las Fonts, llega al núcleo de Salitja. Sale a los campos de Can Passavets y, al encontrarse de nuevo con el Rec de Banyacans, retoma el camino del principio, regresando cerca del Onyar, atravesando el puente sobre el río y terminando finalmente frente a Sant Esteve de Vilobí d'Onyar.

Esta es una bonita ruta para hacer en familia y conocer y entender la fertilidad de la llanura aluvial del río Onyar, enriquecida durante milenios por los sedimentos aportados por el antiguo volcán de la Crosa. Una fertilidad aprovechada desde hace siglos mediante el uso de acequias, como la de Banyacans o la de las Fonts, que aportan el agua necesaria para alimentar los cultivos. Mientras caminamos será necesario que despertemos los sentidos, disfrutando así de los pequeños detalles que nos esperan al margen del camino: las flores en primavera, las garcillas bueyeras detrás de los tractores cuando estos remueven la tierra, el oleaje del trigo, los estorninos, palomas y tarabillas en los cables eléctricos mirándonos desde arriba. El vuelo circunspecto del águila culebrera, el inconfundible cernícalo cuando hace la aleta buscando algún ratón. También es una ruta para entender la importancia que tiene el paisaje agroforestal, tan desconocido y eclipsado por rutas de más renombre y exigencia física. Y no sólo eso, al encanto de caminar por los campos hay que añadir las vistas panorámicas del Bosque de Tries y, especialmente, el fenómeno hidrológico de las Fuentes de Salitja, curiosas surgencias y chorros de agua conectados con la base del volcán de la Crosa y que han acabado formando el arroyo de Riudevila. Si abrimos bien los ojos, seguro que disfrutaremos como nunca de este itinerario de conocimiento de nuestro entorno más cercano, el que nos alimenta y necesitamos conservar más saludable que nunca.

Track de la ruta

En algunos casos RUTES PIRINEUS ha manipulado los tracks para corregir problemas en la recepción de la señal GPS y su posterior grabación. En estos casos algunos tramos de la ruta del track son aproximados y han sido proyectados sobre el mapa.

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Más información

El núcleo de Vilobí d'Onyar, punto de salida de la ruta, está situado a pocos kilómetros del aeropuerto de Girona y de la confluencia entre las carreteras C-25 (eje Transversal), la N-II y la AP-7. Seguimos las indicaciones de "Vilobí d'Onyar" y aparcamos el vehículo en un gran parking público de tierra. Caminamos hasta la plaza Vella y la iglesia de Sant Esteve.

Consulta los alojamientos, restaurantes, museos, pequeños artesanos,... recomendados cercanos a esta ruta: establecimientos cercanos.

Las rutas pueden variar mucho en función de la época del año, de la nieve y de las condiciones meteorológicas. La señalización (marcas, paneles, balizas) que podemos encontrar a lo largo de la ruta también puede variar con el tiempo. RUTES PIRINEUS no se responsabiliza de cualquier mal uso de sus guías y recomienda que cada uno sea responsable y prudente en la montaña. Igualmente, os invitamos a documentaros con libros y guías especializadas para complementar la información descrita. Todos los tiempos son efectivos y toman un carácter orientativo, no se han tenido en cuenta las paradas por pequeñas que sean. Para cualquier sugerencia, RUTES PIRINEUS os invita a enviar un correo a info@rutespirineus.cat.

¿Qué más podemos visitar?

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  Núcleo antiguo de Anglès

  Al abrigo de las murallas del castillo de Anglès se creó la población homónima, declarada Bien Cultural de Interés Nacional. En las fachadas de las casas, grandes portales adintelados y elegantes ventanas góticas y renacentistas nos transportan sin dificultad en los siglos XV y XVI. No hay murallas ni torres, pero el legado del castillo de Anglès sigue vivo.

  Coordenadas GPS: 41.957326º 2.640013º

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  Gerona, Tiempo de Flores

  Gerona, Temps de Flors es una exposición de flores que se celebra en la ciudad de Gerona desde 1954. Desde entonces, cada mes de mayo, se celebra durante una semana esta fiesta primaveral que atrae a gente de todo el mundo. Los monumentos, las casas y sus patios interiores, las calles, los jardines y los parajes naturales emergen revestidos con la elegancia de sorprendentes elementos vegetales. Más info en www.gironatempsdeflors.net

  Coordenadas GPS: 41.985140º 2.826120º

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  Castillo de Brunyola

  El castillo de Brunyola es una fortificación gótica declarada Bien Cultural de Interés Nacional. El castillo, muy bien conservado, está situado en la cima de una colina y, a su alrededor, ha crecido el actual pueblo de Brunyola. El castillo aparece documentado por primera vez en 1106 y actualmente aloja las dependencias del ayuntamiento.

  Coordenadas GPS: 41.904523 º 2.684194º

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  El museo de las galletas Trias

  Dentro de la misma fábrica de las populares galletas Trias, en Santa Coloma de Farners, encontramos un interesante museo dedicado a las galletas. Se muestran herramientas y máquinas utilizadas para hacer pan, galletas y tejas, se recrean diversos espacios, se exhibe una colección de latas antiguas y se proyecta un audiovisual donde se explica la historia de Trias.

  Coordenadas GPS: 41.857123º 2.674522º

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Recorrido

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Iniciamos nuestra ruta en el casco antiguo de Vilobí d'Onyar, justo enfrente de la iglesia de Sant Esteve (0:00h - 118m). Después de contemplar su portada barroca, construida en 1.772, reseguimos el contorno oriental del templo, que tiene adosado el castillo de Vilobí -mencionado ya en el siglo IX-, y continuamos por la calle del Castell hasta una explanada donde vemos el puente para peatones que cruza el río Onyar. 

Campanario de Sant Esteve.

Portada de Sant Esteve.

Antes de cruzarlo vemos a la derecha un panel explicativo con cuatro itinerarios propuestos por el Ayuntamiento de Vilobí y la Diputación de Girona. El recorrido que nosotros realizaremos es una mezcla del tercero y el cuarto, marcados en marrón y rojo respectivamente. A partir de este momento y hasta el final de nuestra ruta será necesario estar atentos y fijarnos en las marcas de pintura marrones y rojas en desvíos, intersecciones, postes eléctricos y barandillas de madera. Las primeras se superponen con las del itinerario 2, marcado en color azul. Paralelamente a esta señalización, iremos encontrando postes indicadores verticales durante todo el camino. 

Panel informativo.

Después de cruzar el Onyar, donde normalmente se pueden ver azulones (Anas platyrhynchos), alguna garza real (Ardea cinerea) y pollas de agua (Gallinula chloropus), nos desviamos a la izquierda, dejando atrás a la derecha el acceso a la zona deportiva municipal de Vilobí. La pista nos conduce hacia el NO con el curso de agua a nuestra izquierda, donde crecen hermosos árboles de ribera como alisos y fresnos. 

Camino de la ribera del Onyar.

Dejamos a la derecha la imponente masía de Cal Tet d'Onyar y más adelante vemos la iglesia de Sant Esteve y su airoso campanario octogonal. También podemos ver las incontables restauraciones que ha sufrido su castillo adosado. 

Campanario de Sant Esteve detrás de una rama de falsa acacia.

Río Onyar y bosque de ribera.

El puente sobre el Onyar y el campanario.

Las marcas de pintura: seguimos la marrón y la roja.

Estallido primaveral de amapolas (Papaver rhoeas) en la orilla norte del Onyar.

Seguimos la pista entre el Onyar y los campos de cultivo.

Silo para almacenar cereales o forraje para el ganado.

Pronto encontramos un desvío a la derecha que nos adentra definitivamente en los campos de cereales. 

Llegamos al desvío y dejamos la pista.

Avanzamos en medio de estas grandes extensiones de cultivos -trigo, cebada y avena principalmente-, que serán baldíos después de la siega, mientras un ejército de aspersores de riego vertical nos marcan el camino. Estamos en el corazón de los campos de Can Bosquets y, al fondo, si el día es claro, podemos ver parte de las Guilleries, el Puigsallança, los riscos de Sant Roc, Rocafesa, la montaña de Rocacorba y buena parte del Pirineo Oriental. 

Trigo y bosque de ribera en segundo término.

Las marcas de pintura indican el camino.

Campos de trigo de Can Bosquets.

Detalle de espigas de trigo.

El camino se embosca un poco y dejamos a la derecha el acceso a Can Vidal, masía medio abandonada y muy pintoresca. 

Acceso a Mas Vidal.

El camino de carro por el que transitamos nos recuerda tiempos pretéritos. Pasamos cerca de las viviendas de Can Salamanya y un poco más adelante llegamos al Rec de Banyacans (0:30h - 125m), bonito canal de riego que es clave para los cultivos de la zona. 

Tejas en Can Salamanya.

Campos de trigo de Can Salamanya.

Llegamos a la acequia de Banyacans y giramos a la izquierda.

Dejamos aquí el camino principal (de vuelta llegaremos per este camino en sentido contrario) y nos desviamos a la izquierda, avanzando junto a la acequia y teniendo buenas vistas del Montseny y el Matagalls. Llegamos a un punto donde dejamos la acequia y pasamos junto a Can Garriga. 

El sendero discurre junto a la acequia de Banyacans.

Giramos a la izquierda.

Tarabilla común (Saxicola torquata) observando desde un cable.

Típico mosaico agroforestal.

Más adelante pasamos por los campos de Can Valls y cruzamos un vial asfaltado que conecta Salitja con la carretera GI-533. 

Llegamos a la pista asfaltada y seguimos recto.

Pasamos ahora por los campos de Can Xifra, dejando a la derecha un estanque de riego y luego atravesamos los campos de Can Toni. Al fondo ya vemos el núcleo de Sant Dalmai. 

El estanque de Can Xifra. Al fondo, Sant Dalmai.

Dejamos atrás un bosque y la masía de Can Coll y llegamos a la plaza Països Catalans (1:00h - 150m), en el centro de Sant Dalmai. 

Estorninos vulgares (Sturnus vulgaris) sobre un cable.

Bosquet de Can Coll antes de llegar a Sant Dalmai.

Avanzamos hacia la bonita iglesia de Sant Dalmai cruzando las calles principales del pueblo. Pasada la iglesia, que destaca por su hermoso campanario con 16 ventanas de arco de medio punto, dejamos el asfalto y subimos por el camino que conduce al volcán de la Crosa. Unos metros más arriba alcanzamos la cresta y nos encontramos un cruce de caminos (1:25h - 150m). 

Dentro de Sant Dalmai también seguimos las marcas.

Garaje vintage.

Campanario de la Iglesia de Sant Dalmai.

Subimos hacia el volcán de la Crosa.

Amapolas (Papaver rhoeas) al margen del camino.

Sant Dalmai con más perspectiva.

La retama (Spartium junceum) alegra el camino. Finales de abril.

Dejamos el acceso al cráter del volcán de la Crosa y nos desviamos a la derecha hacia el hermoso Bosque de Tries. Antes de entrar en la floresta tenemos grandes vistas panorámicas hacia el S-SO, vemos la llanura aluvial por la que hemos transitado y, al fondo, el macizo de Cadiretes, el Montnegre-Corredor y parte del Montseny. 

Vistas a la llanura aluvial del Onyar desde la cresta.

Un poste indicador nos señala el itinerario de las Fuentes de Salitja. Lo seguimos hacia la derecha, pasando cerca de unos hermosos alcornoques con sotobosque de matorral mediterráneo. 

Cortezas de alcornoque (Quercus suber).

Vistas al N desde el Bosque de Tries.

Bonita flor de sotobosque mediterráneo.

El bosque se hace más tupido, casi selvático, con pinos piñoneros y encinas. El sendero desciende nuevamente hacia la llanura, cruzando una pista y resiguiendo el perfil del Bosque de Boada. 

Salimos del bosque y seguimos recto hacia abajo cruzando la pista.

Llegamos a una pista asfaltada que nos lleva directamente a la ermita de la Virgen de las Fonts (1:40h - 139m). 

Las fuentes de Salitja.

Patio de la fuente.

Virgen de les Fonts.

LA ERMITA DE LA VIRGEN DE LES FONTS

Este templo recibe este nombre porque debajo tiene una fuente a la que se accede bajando unas escaleras. La fuente no es única sino un conjunto de varias surgencias y chorros de agua que son fruto de un curioso fenómeno hidrológico: los materiales volcánicos porosos del cercano volcán de la Crosa acumulan agua de lluvia que se filtra fácilmente hacia el subsuelo. En lugares concretos de la base del volcán esta agua puede salir al exterior en forma de surgencia o fuente. La Virgen de las Fonts forma parte del paraje donde se encuentran esta serie de surgencias y fuentes que alimentan el arroyo de Riudevila, tributario del Onyar antes de que éste llegue a Girona. En cuanto a la ermita, el actual edificio pertenece al siglo XVII pero, como ocurre con tantos templos cristianos en todo el mundo, es muy posible que en tiempos primitivos en este lugar se celebraran rituales paganos relacionados con el culto al agua. A partir del siglo VII d. C estas liturgias paganas que existían desde la Prehistoria fueron combatidas por el cristianismo e incorporadas a menudo al culto mariano. Más o menos, tanto unos como otros le pedían lo mismo a sus dioses: que se acabaran las inundaciones o las sequías y que se curaran ciertas enfermedades.

Siguiendo el curso del arroyo de Riudevila, que nace junto a la ermita, seguimos hasta la próxima área de picnic de las Fonts de Salitja, rodeada de hermosos álamos, sauces, chopos, césped y mesas para hacer un picnic. El entorno es muy agradable y parece un oasis entre los campos de cultivo. 

Arboleda en el área de picnic de las Fonts de Salitja.

Nuestro itinerario atraviesa el campo de césped y, siguiendo el Rec de les Fonts, rodea los Amaradors de Salitja, campos semi inundados donde tradicionalmente se remojaban los mimbres y el cáñamo para fabricar cestos y cuerdas. El paisaje ribereño, húmedo, contrasta muchísimo con lo que hemos visto anteriormente, y es muy placentero caminar junto a bonitos sauces, fresnos, olmos, alisos y gatillos que se arraigan poderosamente y fijan los cursos de agua, protegiéndolos de la erosión. 

La acequia de las Fonts y los amaradors.

Paisaje húmedo los Amaradors de Salitja.

Detalle de la acequia de las Fonts.

Detalle de la acequia de las Fonts.

El paisaje húmedo nos acompaña un rato y pronto hacen acto de presencia los huertos del vecindario de las Fonts, que vemos desde el mismo camino. Pasamos junto al molino de las Fonts, recientemente reformado y convertido en centro de interpretación, museo y explicación del paraje de las Fonts, que incluye el volcán de la Crosa. Este molino funcionaba con la fuerza motriz del agua del arroyo de Riudevila y del Rec de les Fonts. Los campesinos venían a moler el trigo para obtener harina. Si vamos al otro lado del molino veremos una gran balsa que también capta y almacena el agua de las fuentes de Salitja. 

Avanzamos hacia el molino de las Fonts.

Saúco (Sambucus nigra) y el molino de las Fonts.

Tres antiguas muelas del molino.

Rec de les Fonts, molino y Bosc d'en Tries.

Seguimos caminando por este camino tan agradable, delimitado por barandillas de madera, siguiendo el Rec de les Fonts. En la otra orilla, detrás de los setos, vemos huertos frondosos muy cuidados por sus hortelanos. 

Huertos del vecindario de las Fonts.

Últimos metros antes de dejar la acequia de las Fonts.

Nos desviamos a la derecha y después de pasar junto a Ca l'Isern, pronto llegamos al centro del pueblo de Salitja y a la bonita iglesia de Santa María (1:55h - 142m). Hay una fuente de agua potable en la misma plaza. 

Llegamos a Salitja.

Detalle de Santa Maria de Salitja.

Santa Maria de Salitja.

Seguimos ahora las marcas rojas que nos ayudan a salir de Salitja. Pronto el asfalto vuelve a dar paso a la arena y las casas se diseminan a medida que nos adentramos en los campos. 

Volvemos a los campos.

Pasada la masía de Can Passavetes llegamos nuevamente al Rec de Banyacans (2:10h). 

Volvemos a encontrar la acequia de Banyacans.

Desde este punto deshacemos el camino que ya hemos hecho en la ida, pasando nuevamente cerca del Onyar, cruzando el puente sobre este curso de agua y llegando a la iglesia de Sant Esteve (2:40h - 118m), donde damos por terminada esta interesante ruta por los alrededores de Vilobí d'Onyar. 

Una última mirada a Sant Esteve de Vilobí d'Onyar.

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